13/3/11

La curiosidad mata al hombre


Mientras paseaba por el inmenso parque, un hombre observo a otro que:
Estaba abrazado a un árbol,
con una oreja apretada fuertemente contra el tronco.
Se acerco intrigado por la escena, y con curiosidad preguntó:
-Señor ¿qué estás haciendo?
-Estoy escuchando la música del árbol, respondió el otro.
-Vamos, vamos. Tiene Usted que estar bromeando.
-Por supuesto que no.
-¿Quieres escuchar? Invito con amabilidad.
No pudiendo más con su curiosidad, el desprevenido paseante contesto.
-Está bien...déjeme comprobar si lo que dice es cierto.
Rodeó con sus brazos el tronco del árbol y pegó su oreja a la leñosa madera.
Mientras el curioso trataba de escuchar las melodías del árbol el otro con cautela y sin despertar sospecha, le pone un par de esposas, le quita la billetera, sus anillos, su reloj, las llaves del coche, toda la ropa y se va corriendo.
Dos horas después, otro caminante que pasaba cerca, vio al hombre desnudo, esposado al árbol, intrigado le preguntó:
-'¿Qué te ha pasado, hombre?'.
El hombre le contó la terrible historia de cómo y porqué se encontraba allí.
Cuando terminó de contarle lo sucedido, el otro movió la cabeza en señal de comprensión, caminó hasta quedar detrás de él, lo besó suavemente en la oreja y mientras se desabrochaba el cinturón y se bajaba los pantalones, le dijo...
-"Me da la impresión que hoy no es tu día de suerte"

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